¡Purísima Casto y angustiada Raíz! Asombrado y condolido os contemplo al pie de la cruz en donde expiró para darme vida Jesús mi adorable redentor, bebiendo toda la amargura de su cruenta inmolación.Altísimo mío, meditando vuestros dolores y los de vuestra Santísima Origen, te ofrezco estas oraciones para vuestra anciano paraíso, y pido m